Y la tierra se movió.

Había escuchado a mi mamá de sus vivencias de los terremotos de 1939 y 1960. El primero siendo bien pequeña y el segundo con dos hijos a cuesta(mis hermanos mayores). Hablaba de lo difícil que había sido, por el sismo mismo y lo que venía despues.

El 27 de febrero me encontraba en mi depto, con Nicole mi hija menor, Carolina la mayor, estaba en Los Ángeles. Terminábamos de ver el festival de viña, yo había ido a ver a los jaivas acá al ladito. Luego de unos tiras y aflojas puesto que no quería dormir sola........quería hacerlo en el suelo al lado mío, a lo que me opuse......finalmente ambas nos quedamos en nuestros dormitorios, como a eso de las 3.15 , a dormir.........Desperté con el movimiento y el grito de mi niña, traté de levantarme de la cama, pero no podía....mi desesperación era no poder llegar hasta donde estaba Nicole. Finalmente, no sé cómo, ella llegó hasta mi dormitorio..nos abrazamos y nos pusimos bajo el marco de la puerta. Muchas cosas pasaron por mi cabeza, pero mi mayor pensamiento, miedos, eran por mi hija que no estaba conmigo. Rogué a Dios que en Los Ángeles no estuviera pasando lo que acá, pero la lógica me decía que la cercanía hacía eso poco posible. Abrazando fuertemente a Nicole, hicimos lo único que permite la situación.........rezar, rezar y rezar, pedirle a Dios que esto acabara. Sentíamos como caían las cosas, como gritaba la gente, las alarmas activadas, los perros aullando y ladrando y lo peor, como se movía y crujía el edificio. Al darme cuenta que esto no pasaba(para nosotras fueron mucho más que 3 minutos, seguramente el edificio seguía en movimiento por una cuestión de construcción, natural y normal), le hablé a mi niña que se quedara en el lugar mientras iba en busca de ropa para que se vistiera.....no sé cómo llegué a su dormitorio....finalmente ambas nos vestimos y cuando estábamos listas para salir, llegó su papá y en auto nos fuimos fuera de Concepción. Llegamos, calculo yo, a mitad de camino entre Concepción y el cruce a Yumbel. Nos quedamos a un costado de la carretera, escuchando radio.........hablábamos poco, pero los tres teníamos sólo una preocupación en nuestras mentes y corazones....no saber cómo estaba Carolina.......la radio informaba que el terremoto se había extendido desde la 4ª a la 10ª regiones, por tanto mi petición que no llegara a Los Ángeles no se había cumplido.........esperamos que amaneciera y volvimos a Concepción, nada se sabía aún de todo de lo que nos informamos despues. Terremoro grado 8.8, maremoto, destrucción....Como prevensión, nos fuimos los tres a casa de mi ex, que se ubica a la salida de la ciudad.......insistíamos en comunicarnos, pero no había caso. Echando periquitos contra "claro", pues eran los únicos celulares que no lograban nada de señal........Al vernos tan preocupados, pero sin tragedia, pues debíamos mantener la calma, Nicole nos dijo de que no debíamos preocuparnos tanto pues Carolina estaba con Martino(pololo) y su familia. La verdad de absoluta confianza todos ellos. A las 22.58 del día domingo, y ya con nuestra desesperación de padres, controlada pero a gran altura, hicimos lo que se hace en estos casos..rezar......los tres nos unimos en una fuerte, esperanzadora, optimista oración...........a las 7 de la mañana del día lunes, un familiar nos avisa que a las 23 hrs. del día domingo habían logrado comunicarse con Carito y que estaba bien.....de hecho, mejor que nosotros..........Dios nos escuchó....Ella llegó el martes, que a pesar que se encontraba muy bien en Los Ángeles, quería estar con nosotros.

Los días posteriores fueron igual que todos, con al papá de mis hijas haciendo guardia junto a todos los hombres del lugar, todas haciendo colas de 3 horas para conseguir lo que se ofrecía, buscando agua por donde fuere.

Han pasado dos semanas del siniestro, ya se han regularizado los servicios. Ya instalada en mi depto, al cual nada le pasó......pérdida de algunos enseres, pero nada que no se pueda reparar.

Con el pasar de los días y con las comunicaciones reestablecidas nos hemos podido informar y enterarnos de la verdadera dimensión del suceso. Saber que lamentablemente es uno de los terremotos más grandes de la historia de la humanidad(a partir del año 560, en que hay información), sólo superados por el sismo de 1960 en Valdivia(9.5) y Concepción y otro en Asia(9.0). Tristemente somos los campeones en cuestión de movimienstos de nuestra querida tierra.

A pesar de esto, y que me han hablado de abandonar mi ciudad......AMO MI CONCEPCIÓN Y NO ME VOY DE ACÁ.

Algunas lenguas dicen que la tierra está reclamando "por los cambios".........pero eso es tema de una nueva entrada.

Sólo nos queda hacer lo que se ha hablado tanto en estos días, levantarnos y reconstruirnos.....

Y como dijo nuestra querida "reina de corazones"......."y en que vereda nos quedaremos, en la de los llantos o en la de la reconstrucción?".

y aunque ella ya no esté al frente, nos dejó una buena herencia..........entre muchas, Coraje.