Mi hija y la cantante.

Hoy ordenando y limpiando la secciòn peluches de las nenas, me reencontrè con un oso que tiene un lugar muy especial dentro de la familia juguetera. Una de las veces que Marcelita se encontraba hospitalizada, llegò un grupo de personas a visitar la secciòn de niños con càncer. La sala en que se encontraba mi nena, estaba a corta distancia de la anterior y como las separaciones entre sala y sala son la mitad concreto y hacia arriba vidrio, puedes ver lo que sucede al otro lado. Con la curiosidad de un niño, ella se puso a observar lo que sucedìa algunos metros màs allà. El grupo visitante, llegò con bolsas de dulces y regalos, les fueron entregando a cada niño los presentes, ellos obviamente felices recibìan con sus caritas llenitas de gratitud. Entre las personas que repartìan esto, se destacaba una mujer joven muy bonita, quien se acercaba a los niños y les hablaba con mucha ternura. Mi Marcelita no dejaba de mirar todo esto, la mujer se diò cuenta de esto y le dirigiò un saludo con la mano, al cual mi nena respondiò, cuestiòn rara pues mi niña no era muy sociable y menos con quien no conocìa; debo decir si, que a veces lo era, pero con personas con mucho carisma.

La joven mujer se despidiò de los niños y se dirigiò hacia la salida de la secciòn, pero cuando iba pasando por fuera de la sala en que se encontraba Marcelita se detuvo y entrò. Se acercò a ella, la tomò en brazos, la acariciò y la acurrucò en su pecho. Mi niña se dejò querer y tambien la abrazò.........yo observaba todo esto muy extrañada, pues como dije antes, Marce no era muy dòcil. Le preguntò el nombre, ella contestò en su media lengua, la joven le dijo que ella se llamaba Soraya y que era de Colombia que venìa a visitar a los niños que estaban muy enfermitos de la otra sala, pero que se habìa enamorado de ella y la pasaba a ver tambien. Mi marce con sus grandes ojos la miraba y parecìa entender. Luego se dirigiò a mi y me preguntò que tenìa, que por què estaba ahì, brevemente le contè sobre la enfermedad.........abrazò fuertemente a Marcelita muy emocionada. En seguida le pidiò a las personas que la acompañaban que le entregaran un regalo a cada niño que habìa en la sala, les dirigiò algunas palabras......luego ella misma sacò un regalo de la bolsa y se lo entregò a mi niña, abrieron el paquete juntas y saliò un hermoso oso que Marce abrazò fuertemente. La joven le regalò una foto con algo que habìa escrito, a Marcelita, y se despidiò diciendo que deseaba pronto se encontrara cura para el mal de mi niña, nos abrazò a ambas y se fue................................Cuando leì la dedicatoria de la foto, pude darme cuenta de quien era. Me parecìa cara muy conocida, pero no la relacionè con nadie. Era la cantante Soraya, colombiana, conocida por varios temas de èxito radial de mucha profundidad. Se encontraba en la zona promocionando su ùltimo disco y habìa pedido visitar la secciòn oncològica de niños del hospital, situaciòn que repetìa donde iba, sin prensa, ni càmaras, ni parafernalia; era una actividad que le gustaba realizar en el màs absoluto anonimato, es decir, algo que hacìa de corazòn. Su mamà habìa fallecido producto de càncer mamario; eso explicaba su actividad.........Años despuès ella tambien se viò afectada por el mismo mal, pero gracias a Dios todo saliò bien. Hizo tratamiento a tiempo y se recuperò.

Marcelita siempre quizo muchìsimo el osito que le regalò Soraya, creo que entre ambas se formò un hilo invisible producto de las vivencias de ambas. Mi niña era reacia a compartir con la gente, pero cuando lo hacìa, era de seguro por una razòn muy muy especial.

Siempre que escucho a la cantante, me acuerdo del episodio del hospital y me alegro montones del èxito que ha logrado a nivel internacional.........se lo merece.

El osito limpio y aseado, sigue ocupando el lugar de privilegio en la familia juguetera.......